Tengo El Orgullo De Ser Piurano

jueves, 6 de abril de 2017

“NO TODO FUE INUNDACIÓN, HOY TENEMOS AGUA Y FOLLAJE PARA EL GANADO”

Después de ver las diversas inundaciones y todo lo negativo que nos está dejando el “niño costero” en Piura, hoy nos toca ver también el lado positivo de todo esto, nos damos cuenta que no todo está perdido para los Piuranos. Muchos de los campesinos de Sullana, Morropon, Tambogrande, Chulucanas, Ayabaca y Huancabamba ven con ojos de esperanza las intensas lluvias registradas en nuestra región Piura duarnte estos meses, para muchos de ellos esto ha generado una nueva luz de esperanza y de para sus campos y para sus cultivos próximos, este año según nos manifiesta habrá mucha agua para poder sembrar con tranquilidad, así como también habrá follaje y pasto para el ganado. 

Así nos lo comenta un poblador de Chulucanas, quien pudo salvar sus crías de ganado caprino de las fuertes lluvias. Haciendo un recorrido por Chulucanas nos encontramos con un poblador quien nos comenta lo que tuvo que hacer para salvar sus cabras y algunas de sus vacas de las inundaciones: “No todo fue inundación mi amigo, con el grade favor de Dios estos fenómenos  nos están dejando mucha agua y follaje para el ganado, si es verdad, estas intensas lluvias nos han hecho perder horas de sueño, nos han mantenido en alerta y sobre todo con mucho miedo, no se imagina lo que muchos de nosotros hemos tenido que hacer para salvar lo poco que nos quedaba, yo tuve incluso que hacerles unas casas especiales a mis animalitos para que no terminen bajo el agua o se mueran de frio; fueron días y noches muy difíciles para nosotros, parecía que ya no podíamos resistir más; pero hoy parece que nace una luz de esperanza, podemos ver estos campos verdes, sembrar nuestras chacras con mucha tranquilidad, y lo mejor es que nuestros animales tendrán mucho pasto, ahora hay mucha yerba para ellos”. Manifiesta don Gerardo Montenegro García, reflejando un rostro de alegría. 


Es verdad, los campos hoy lucen verdes, llenos de vida, parece increíble ver lugares que un día fueron arena y desierto, hoy se muestran llenos vegetación y esperanza . Los pobladores salen muy contentos cada mañana con su ganado a pastar, y verlos por la tarde ya a la puesta del sol nuevamente contentos, ellos nos manifiestan que pronto sus animales engordarán y podrán venderlos a un mejor precio. Así de hermosa y prodigiosa es la madre naturaleza.